Los nuevos clientes inmobiliarios en Barcelona
Los precios de las viviendas en Barcelona siguen en ascenso y de acuerdo con un artículo de La Vanguardia, este comportamiento del mercado inmobiliario se debe a la irrupción de nuevos clientes con cada vez mayor poder adquisitivo y el deseo de vivir en una ciudad moderna, cosmopolita, incluidos los profesionales extranjeros.
De acuerdo con La Vanguardia, en Passeig de Gràcia abundan las compraventas internacionales de inmuebles, por lo que se fortalece su imagen de una zona exclusiva. Mientras en calles como Aragó, Muntaner, Mallorca o Bruc han aumentado los llamados “pisos de alto standing”. Familias de clase media-alta y personas mayores también habitan en estas zonas, donde se estiman las hipotecas en 1.500 euros al mes.
La vivienda tradicional de segunda mano sin reformar en el cuadrante Tetuán-Clínic-Diagonal-Gran Vía alcanza el medio millón de euros, mientras que si está reformada se añade al precio unos 100.000 euros. Quienes manejan proyectos de viviendas en construcción o en planos, también están apostando por diseños ambiciosos, atractivos para usuarios acomodados.
El progresivo encarecimiento del barrio central de L’Eixample, está siendo secundado en el valor de venta medio de otros dos distritos: Sarrià-Sant Gervasi y Les Corts. “El importe por metro cuadrado se situaba el primer trimestre de 2017 en 490.500 euros en la Dreta y 389.700 en l’Antiga Esquerra, aunque por debajo de barrios de gran popularidad como Gràcia, Gòtic, Born, Barceloneta o Poblenou, en los que se dispara el precio por metro cuadrado por la abundancia de pisos pequeños”, según explica La Vanguardia.
Para el segundo trimestre de este año, de acuerdo con cifras municipales, L’ Eixample superó los 5.000 euros de media por metro cuadrado en pisos de segunda mano. El precio medio de toda la ciudad no alcanzaba los 4.100 euros/m2 desde el inicio de la crisis y la burbuja inmobiliaria.